La otra ruta del vino argentino

• Published in: Mercurio (Santiago, Chile)
• Main Author: POR Sebastián Ríos / La Nación / Argentina / GDA
• Format: Newspaper Article
• Language: Spanish
• Published: Santiago, Chile Grupo de Diarios América 21.12.2014
• Subjects: Mounier, Luis; Velasco, Ignacio
• ISSN: 0717-8034

  "Está creciendo el número de extranjeros que viene", dice Mariela Ilardo, hospitality manager de Piattelli, bodega cuyo moderno edificio parece salido del californiano Napa Valley: "La mayoría son viajeros europeos, pero también vienen de países limítrofes (principalmente Brasil), y en menor proporción de Estados Unidos", dice luego y explica que estos forasteros, turistas más exigentes, ahora encuentran en Cafayate una infraestructura y servicio que se está adaptando a esos nuevos estándares. Ignacio Velasco, que es el gerente general de la bodega Finca Quara, coincide con Mariela: "Cafayate ha cambiado. Esta zona siempre tuvo un alto porcentaje de turismo 'gasolero' (de bajo costo) o mochilero", dice y agrega que, con la aparición de una oferta de hoteles cinco estrellas, se ha desarrollado una red que ofrece mayores niveles de confort. Sin embargo el camino hacia la alta gama del "torrontés de altura" (como llaman a este blanco salteño que se desarrolla en viñedos ubicados entre los 1.600 y los 3.100 metros de altura sobre el nivel del mar) no respondió solo a la mejora en la elaboración del vino que atravesó a todas las regiones del país. Como una manera de enfrentar los mayores costos que suponía su emplazamiento -el acceso es más lejano y difícil que en las otras regiones vitivinícolas-, muchas bodegas salteñas decidieron hacer foco en productos premium. Según datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura, el 99 por ciento de las uvas que se producen en Salta es destinado a vinos finos. Fernando Musumeci acaba de volver de su tercera estada en Cafayate. Como apasionado enófilo (recientemente abrió su propia vinoteca en Caballito: Mr. Wines), Fernando realizó visitas en familia y con amigos. "Antes de salir, arreglamos nuestra llegada a las distintas bodegas, e incluso planteamos qué queríamos probar: ver qué están haciendo los enólogos de nuevo, qué es lo que va a venir. Claro que no es solo el vino lo que nos atrae de Cafayate. Es también el paisaje, la gastronomía regional y el recorrido en sí entre los distintos lugares", dice el experto, quien agrega algo que uno puede comprobar en terreno: estos meses de primavera son el mejor momento para venir: "Después, en verano, las crecidas de los ríos pueden complicar el acceso a algunos lugares que no hay que dejar de visitar, como Cachi o Molinos".